viernes, enero 04, 2013

Madrugador













El asesino llegó de madrugada a la puerta de la habitación donde dormía su víctima. Apretó bien el cuchillo y con la otra mano, despacio, sin un ruido, giró el picaporte. Lo que el asesino no sabía era que su víctima ya lo esperaba recostada, inquieta y muy despierta, con una fría Magnum Desert Eagle Crome debajo de la sábana.