domingo, febrero 14, 2010

Fondo de los libros



Desde mayo de 2009, Ruth Castro es la encargada de la Librería del Teatro Martínez-Fondo de Cultura Económica. Joven inteligente y sensible al conocimiento y la belleza de la palabra, ocupa pues, hoy, un puesto ideal. La entrevisté sobre su nueva responsabilidad y esto fue lo que obtuvimos.

Brevemente, ¿cuál es tu formación profesional en relación con los libros y otras publicaciones? Tuve la oportunidad de estudiar la carrera de Lengua y Letras Hispánicas en La Universidad Veracruzana del 2002 al 2006, y en Xalapa comenzar a participar en la promoción y fomento a la lectura en eventos públicos, presentaciones de libros, escribiendo artículos para revistas literarias y demás actividades de este tipo. Por otro lado, aún estudiando la carrera trabajé en corrección y edición en una pequeña editorial que se encargaba de algunos proyectos relacionados con la SEP y con el estado (Veracruz), misma labor que he seguido haciendo en Torreón, aunque más esporádicamente. Sin embargo, la experiencia en librerías comenzó desde que tenía 16 años, cuando trabajé en la librería Astraleph, en el centro de Torreón, y en mi estancia en Xalapa trabajé por varios años en librerías Ganco, llamada entonces Gandhi Colorines, pues se especializaba en libros para niños, aunque estaba tan surtida como cualquier librería Gandhi del DF. En esta última fue donde más aprendí acerca de editoriales, de pedidos y devoluciones, de promociones, en fin, del trabajo que requiere cualquier librería, aunque obviamente está ligado a mi aprecio por los libros (por sus contenidos).
o
¿Qué representa para ti esta encomienda?
Para mí significó desde el inicio una gran responsabilidad que acepté con mucho gusto, tomando en cuenta que, pese a que la librería es filial del Fondo de Cultura Económica, en realidad está subsidiada por el Patronato de Teatro Isauro Martínez que, como sabemos, es una asociación civil. Con esto me refiero a que forma parte de un gran esfuerzo local por ofrecer cultura a la gente de la región, y en este sentido, a ratos resulta difícil sostenerse, a diferencia de las grandes cadenas que amortizan a sus pequeñas sucursales y mantienen a éstas igual de surtidas que otras. Entonces conlleva bastante dedicación y tiempo, y esto lo sabía desde que acepté, pero es un trabajo que si te agrada y te sientes comprometido con los fines que persigue, es decir, con la promoción de la lectura, pues no se siente tanto el esfuerzo y te llena de pequeñas satisfacciones.
o
¿Cuál o cuáles son las políticas de promoción que estás habilitando?
La librería tiene la ventaja de compartir espacio (y finalidades) con el Cafecito del Fondo, así que en coordinación con éste se organizan actividades de lo que llamamos nuestro programa permanente de fomento a la lectura. Además, la sala infantil cuenta con un teatrino y tenemos todo el apoyo del TIM para eventos más grandes. Esto facilita en gran medida que podamos mantener promociones o combinarlas con las actividades. Tenemos, por ejemplo, los martes de cuentacuentos, y entre quienes asisten se les regalan cupones de descuento o se van promocionando distintos libros infantiles que tienen que ver con las narraciones del cuentacuentos; en otras ocasiones tenemos regalos para los niños que participan en los cuentacuentos. Cada mes tenemos también lecturas abiertas al público, en las que se va variando el tema, y en estas fechas se ofrece todo el material del FCE con el 20% de descuento, además de cortesías para los que leen. Hay otras actividades que van cambiando cada mes, y que también dependen de gente que se acerca para pedir el foro del café y hacer actividades en conjunto, como en los que participan músicos de la región o conversatorios de distintos temas dedicados a adolescentes, universitarios o el público en general. Todo con el objetivo de que personas de distintas edades tenga experiencias gratas relacionadas con la lectura.
o
¿Qué reacción has percibido del público?
La respuesta del público ha sido placentera, desde la gente que busca la cartelera cultural al principio de cada mes, quienes se acercan buscando el foro del café porque tienen una buena impresión del lugar hasta quien se va contento porque encontró o le conseguimos el libro que había estado buscando. En lo personal creo que falta mucho trabajo, es decir, aunque los comentarios a favor hacen sentir que se están haciendo bien las cosas, tenemos actividades y propuestas que nos gustaría llevar a cabo poco a poco, además de traer más oferta de editoriales y/o eventos de mayor resonancia en la región, pero ahí vamos.
o
¿Se “mueven” los libros de autores laguneros?
Sí. Aunque cabe decir que no todos los autores laguneros se “mueven” igual. Mi entrevistador, por ejemplo, es uno de los más queridos, junto a otros autores como Saúl Rosales, por mencionar a otro incansable promotor de la literatura. Sin embargo, hace falta que los mismos autores hagan más promoción de su obra, que participen en lecturas o en eventos para que la gente los conozca.
La librería del TIM-FCE está ubicada al lado del Teatro Martínez, sobre la Matamoros. Felicidades a Ruth por atender tan bien este espacio y por no bajar ni un segundo su entusiasmo bibliográfico.